Diablos de polvo (ES POP, 2012), de Roger Smith
Sobrevivir después del Apartheid
La historia fue en su día narrada en directo por todos los medios con tanto detalle como lo fue la caída del muro en 1989 o la desintegración de la Unión Soviética. Fueron años en los que se aceleraron los acontecimientos de una manera prodigiosa: en 1990 el gobierno de Sudáfrica liberó a Nelson Mandela. En 1993 le otorgaron –junto a De Klerk-, el premio Nobel de la paz. En 1994 se celebraron las primeras elecciones con sufragio universal, Mandela fue investido presidente y el Apartheid pasó a los libros de historia. Pero una cosa es que el parlamento de Noruega conceda el Nobel y otra muy distinta el conseguir la paz, porque la paz … como contaban Les Luthiers en una de sus actuaciones, La Paz está en Bolivia. Tras el fin del Apartheid, Sudáfrica se convirtió en uno de esos países de los que llegan noticias muy de vez en cuando, principalmente a causa de alguna catástrofe humana o natural. Pero una vez pasadas las celebraciones por la victoria de Madiba los sudafricanos tenían aún que sobrevivir.
Esta novela trata sobre Sudáfrica casi veinte años después del fin del Apartheid y la biografía de los personajes protagonistas está escogida con intención. Estamos en 2011 y Disaster Zondi es un zulú que abandonó su aldea en la adolescencia y progresó en la policía de la capital. Conduce un BMW, lleva gafas Diesel, vaqueros y zapatillas de marca y polos Lacoste de colores llamativos. Cuando regresa a Zululandia, Zondi pertenece ya a la nueva Sudáfrica y lleva consigo su coche, su ropa pija y ninguna nostalgia. Al contemplar los valles polvorientos preguntará a un desconocido:
– ¿Cuándo llovió por última vez? – El zulú rió.
– ¿Puede una anciana reseca recordar su noche de bodas?
Esta puta gente, pensó Zondi. Todo el mundo es poeta.
Zondi será lo más parecido a un amigo que encuentre Robert Dell, el segundo protagonista de la historia, aunque no compartan la boutique donde renuevan su vestuario. Dell es periodista, está casado con una mulata, tiene dos hijos, lleva su rubio pelo largo y mantiene la misma estética progre de cuando era un universitario anti Apartheid.
La violencia descontrolada de esta novela sobrepasa lo imaginable, pero el relato tiene cierto aire notarial, rutinario. Todo el mundo está demasiado ocupado en mantenerse alejado de problemas como para escandalizarse por un cadáver más o menos. Pero el autor se muestra especialmente cruel con Dell, porque en la historia de corrupción y muerte en la que le han metido lo que está en juego no es la justicia sino la supervivencia. Zondi y el resto de los personajes lo tienen claro. Y saben también que Dell, que va a añorar los años en los que luchaba en la universidad contra al Apartheid, es de entre todos los personajes de la novela el que está menos preparado para sobrevivir en la Sudáfrica postapartheid que muestra Roger Smith.
En el siguiente vídeo de presentación ofrecido por la editorial, el autor afirma que Diablos de polvo no es una carta de amor. No lo es, desde luego.
——————– Ficha técnica: Diablos de polvo (ES POP, 2012), de Roger Smith. Título original: Dust Devils (2011) Tapa blanda con solapas.344 páginas. Calificación: 4 Cadáveres (Muy buena)
25 enero 2013 a 07:44
Estoy deseando leerla
25 enero 2013 a 10:18
Hola, gatolonicato. Wie geht’s dir? Con mucho gusto te la dejo. ¿Te la llevo el domingo al teatro?
28 enero 2013 a 12:31
¡Vaya recomendaciones! Eso sí es salirse de los trillados caminos habituales del género.
Supongo que como todo país que se precie de tener literatura, acabaremos leyendo novela negra de Groenlandia. Mongolia o Nepal.
28 enero 2013 a 12:49
Hola, Flames. ES POP es una pequeña editorial que edita libros diferentes. Incluso han lanzado un libro bajo el modelo de mecenazgo. Pero este Roger Smith cuenta con bastantes valoraciones en Goodreads como para considerarle un escritor minoritario, aunque ambientar una novela negra en Sudáfrica no sea muy normal.
Saludos.
29 enero 2013 a 13:57
Quizás conozcáis la página. Yo no me había fijado en el mapa hasta hoy. Pero no sale Disaster Zondi.
http://detectivesdelibro.blogspot.com.es/p/mapa.html
29 enero 2013 a 18:08
Hola, Flames.
Sí, el blog de Alice Silver es un clásico y hace años que lo tengo en mi blogroll. Pero a pesar de lo completo que es … a ver quién es el guapo (o la guapa) que es capaz de haber leído a todos los detectives de novela negra dle mundo mundial.
Un saludo.
30 enero 2013 a 17:35
Pocas veces la metáfora de que un libro es un directo al mentón es más adecuada que esta novela. Sólo se me ocurre el término de tremenda al ahblar de ella.
Y no es tan sorprendente lo de la novela negra en Sudáfrica, hay unos cuantos ejemplos, capitaneados por la serie de James McClure, una de las series canónicas de la novela policíaca.
30 enero 2013 a 18:44
Hola, José María.
Hace meses que le tengo echado el ojo a la novela de McClure «La canción del perro», pero de momento esta de Smith es la primera novela negra de un autor sudafricano que leo. ¿Qué tal es McClure?
Saludos.
30 enero 2013 a 21:48
¡Tiempo sin que publicaras un comentario! Yo estoy muy entretenida con Lawrence Block y he decir que me está gustando mucho ¡Arrivederci!
30 enero 2013 a 22:00
Lo de «directo al mentón» me recuerda a Roberto Arlt.
30 enero 2013 a 22:32
Este año he leído dos novelas sobre sudáfrica, La canción del perro, magnífica y Un hermoso lugar para morir, pasable. Ambas transcurren en los años 50 y 60, me parece muy interesante poder descubrir la evolución del país con estos personajes. Gracias por la recomendación. Por alusiones: llevo 179 personajes y me quedan 276 (y los que siguen entrando), nunca terminaré :). Flames, Disaster Zondi no sale en el mapa porque no le he dedicado una entrada y no forma parte de una serie…
30 enero 2013 a 23:18
James McClure me gusta muchísimo. Me parece uno de los escritores más brillantes, irónicos e incisivos que conozco, sin necesidad de discursear ni de dar lástima, y eso que el escenario de sus novelas es la despiadada Sudáfrica del apartheid.
Para que veáis el tono descriptivo y nada rimobnbante, en lugar de hacer una apología antisistema tenéis este ejemplo en que habla un forense, que está viendo un cadáver:
“Si les parece bien, caballeros, quisiera continuar —dijo—. Tengo que supervisar las flagelaciones de hoy en la cárcel, y luego he de acudir a varios domicilios en los que hay niños con esa gripe que nos persigue”
Después de ler esto se te queda un cuerpo ….
31 enero 2013 a 07:50
Alice, José: pues me apunto «La canción del perro». Gracias por la recomendción.
Un saludo.
31 enero 2013 a 07:54
Beorn: entiendo que eres una entidad múltiple porque no me imagino a Beorn que yo conozco leyendo a Block 😉
Me alegro que te esté gustando. Para mí Block está entre los grandes de todos los tiempos.
Un beso.
31 enero 2013 a 19:29
Alicia; gracias por la aclaración. En ningún caso era un crítica. Tu web me parece memorable.
31 enero 2013 a 19:33
No me lo he tomado como una crítica Flames, símplemente explicaba, como hago en algún comentario de la página del mapa, el criterio para incluir los personajes. Saludos
1 febrero 2013 a 17:26
Ya lo sé Alicia; pero quería aclararlo. Y manifestar mi sorpresa porque –tonto de mí– todavía no había visto el plano de tu web.
Y por preguntar ¿algo de Persson?